El lugar, ubicado en Maipú, también ofrece contención psicológica a los hombres que combatieron en la guerra.
Municiones, cascos, una cruz blanca en honor a los soldados caídos, rosarios y fotografías en blanco y negro son algunos de los elementos que exhiben los veteranos y con los que buscan que su paso por la guerra de Malvinas no se desvanezca en el tiempo.
Después de 40 años, el horror que vivieron en las Islas y el orgullo por defender el territorio argentino siguen intactos.
En un museo montado desde hace tan solo un año en la esquina de Patricias Argentinas y Presidente Sarmiento, en Maipú, la Asociación Veteranos Unidos por Malvinas, con el apoyo de la Municipalidad, logró instalar un espacio para contar las vivencias de los que participaron del combate de 1982.
Daniel Carreras, uno de los 9 veteranos que dedica su tiempo para recibir a los visitantes y relatarle su experiencia, detalló que en el lugar encontrarán “la historia de la sagrada gesta de Malvinas”.
“Todo lo que se ve acá estuvo en la guerra y en el fondo está el cenotafio con un soldado mirando la cruz de uno de los 649 hombres que regaron con su sangre la turba malvinera para defender nuestra patria. Dios y la Virgen quisieron que algunos volviéramos. Yo volví con muchas secuelas, pero volvimos… Ellos lo dieron todo, lo más preciado, que es la vida”, sostuvo Daniel mientras señalaba cada uno de los objetos.
Algunas de las reliquias que se pueden observar en el museo son municiones del Ara General Belgrano junto a la historia de su hundimiento. Todo fue donado por veteranos de toda la provincia.
“Tenemos linternas de aquella época que usaban los buzos tácticos y maquetas del submarino Ada Santa Fe y del destructor Rosales, por ejemplo, que fueron cedidas por la delegación naval de Maipú”, agregó.
El veterano destacó que hasta el 2 de abril pasado no contaban con un espacio físico y que tampoco en 39 años habían recibido contención psicológica, pero en este lugar la comuna brindó acompañamiento terapéutico para todos los hombres que estuvieron en las islas.
De esta forma, una vez a la semana se reúnen para expresarse y poder alivianar la carga tras el conflicto bélico.
“La gente está tomando conciencia de lo que sucedió en aquel momento y quiénes son los veteranos de guerra. Hoy la lucha continúa con la palabra. Nosotros tenemos que malvinizar. La gesta de Malvinas dejó grabada en la memoria de los argentinos una brecha para siempre y antes de que se muera el último veterano del país tenemos la obligación de que la juventud sepa qué pasó en aquel momento y él inculque lo que sucedió”, dijo.
Y concluyó: “El 2 de abril es todo el año y debe estar presente en la memoria de los argentinos”.
El veterano, junto a sus compañeros y con el apoyo de la Municipalidad, está planeando un viaje a las islas. “Sería cerrar el círculo”, dijo y señaló que viajarán con acompañamiento psicológico.
El museo está abierto al público de lunes a viernes 8 a 18 y reciben visitas de escuelas.